No han pasado ni 24 horas tras las elecciones, y ya se evidencia una profunda crisis política en el país heleno. Tal como señalamos ayer en nuestro particular análisis, el presidente de Grecia, Carolos Papulias, encargó al candidato de Nueva Democracia, el conservador Andonis Samarás, la formación de un gobierno de coalición, para lo que tenía un plazo de tres días. Finalmente no han necesitado ni uno de ellos, ya que han pasado la pelota a los reformistas de Syriza, dándose por vencidos ante la negativa de unos y otros.
"Fue imposible. Devolví el encargo al presidente", señaló en un mensaje televisado. La oferta del gobierno de salvación, extensible a todas las formaciones exceptuando a los fascistas Amanecer Dorado, fue respondida de la siguiente forma: Syriza e Izquierda Democrática (Dimar) se reunieron brevemente para mostrar su negativa al pacto, el PASOK aunque estaban dispuestos a cooperar, no lo harían sin la presencia de otras fuerzas de "izquierda", y Griegos Independientes y el Partido Comunista de Grecia directamente rechazaron reunirse con él, informó la agencia de noticias DPA.
Así pues, la tarea recaerá ahora sobre el líder de Syriza, Alexis Tsipras, quien será convocado mañana por Papoulias y recibirá el encargo de formar gobierno, para lo cual tendrá los mismos tres días que se le dieron a Samaras. Difícil lo tendrá también el partido reformista, ya que ni sumando las tres formaciones pretendidamente de 'izquierdas', tal como desean, se acercan a la mayoría absoluta (112/151). Ni si quiera un hipotético apoyo de Griegos Independientes les otorgaría esa posibilidad (145/151). La única salvación para formar el gobierno en minoría, sería que ND apoyara la coalición, o al menos se abstuviera.
En caso de que tampoco fueran capaces de formar un gobierno de unidad, sería el turno del líder del PASOK y por último del Presidente, aunque llegados a ese punto, lo más probable es que en unas semanas se volvieran a convocar elecciones legislativas para junio.
Por su parte, la Unión Europea está redoblando sus amenazas y presiones para que Grecia no se desplace del rumbo fijado. "O se adhieren al programa y reciben la financiación de los estados miembros o tendrán que suspender pagos", indicó un alto cargo de la zona euro a Reuters. Tanto es así, que el país sólo cuenta con recursos suficientes para afrontar el pago de salarios públicos y pensiones hasta finales del próximo mes de junio si no logra formar antes un Gobierno que negocie con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y Bruselas el desembolso de un nuevo tramo del segundo plan de rescate recibido por el país heleno.
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